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| fotografia tomada de www.futbolred |
Junior saltó al gramado del Metropolitano con el orgullo de ser el campeón del fútbol colombiano. Salió al caluroso gramado luciendo una nueva estrella en el escudo que tiene estampado en su uniforme. Salió engreído... y sus hinchas pensaron que la tarde de ayer sería el momento perfecto para validar su poderío.
Por lo menos eso era lo que se esperaba después de la vibrante forma en que se cerró la fase final en donde se consiguió el título.
Lástima que tuvo tuvo que desperdiciar casi noventas minutos de un juego para darse cuenta que le falta un atacante de categoría, que está ávido de un jugador que marque la diferencia y que haga olvidar rápidamente al efectivo Carlos Bacca. Ayer su reemplazo en posición fue Luis Paez, quién tuvo varias oportunidades pero no fue profundo en su juego ni en el enfrentamiento a los defensas rivales para rematar con peligro al arco que custodió el cancerbero Alejandro Otero.
El juego para los rojiblancos fue salvado por el espectacular gol marcado por el capitán Giovanny Hernández ante un lanzamiento desde la izquierda del recién ingresado Sebastian Hernández. El diez tiburón se inventó una magistral chilena que terminó en el fondo de las redes quindianas. Giovanny enmarcó con laureles su centenar de goles anotados en el fútbol colombiano.
Así inicia Junior el año 2012, con un empate a un gol ante Deportes Quindío y un sabor amargo de no tener un jugador que intimide a las defensas rivales.
Esto apenas comienza y esperamos que este año sea mejor que el anterior para el cuadro barranquillero.
